darc night 2019

LocalidadLondres, Reino Unido
Planificación de la iluminaciónLight Bureau
FotosGavriil Papadiotis

iMelt

Con iMelt, los diseñadores de iluminación del estudio Light Bureau han querido evocar las sensaciones de la temporada de invierno recreando un refugio que invitara a las personas a entrar y participar en la instalación interactuando con ella. La obra temporal consistía en una tela blanca transparente, similar al papel de los regalos de Navidad, colgada en filas paralelas dentro de una vetrina de acero. Los velos de cada capa, más cortos a medida que se acercan al punto central de la estructura, creaban por sustracción un lugar acogedor para el visitante: un iglú en el que refugiarse durante el invierno.

La instalación podía apreciarse desde distintas perspectivas. Moviéndose alrededor de la obra, se podía ver cómo surgía la forma del iglú, mientras que dentro el participante dirigía su atención a la tela, a la geometría interna del espacio y a la luz, capturada desde un nuevo punto de vista. Aquí el visitante podía quedar cautivado por la refracción de la luz sobre la tela transparente que creaba destellos y sombras mientras se movía.

La iluminación diseñada por Light Bureau tenía la intención de recrear el momento en que la luz invernal se filtra a través de las capas de hielo de un iglú: al pasar por los velos colgantes, la luz daba profundidad y definía los niveles individuales de la estructura. Se habían colocado trece perfiles lineales Neva 7.2 (RGBW) en filas en el techo de la instalación, y cada uno de ellos se había programado según un escenario de iluminación preciso a través de un controlador DMX especial.

Dentro de la programación, dos escenarios representaban la luz del día y su paso por las paredes de hielo; el primero consistía en la transición de luz cálida a fría de manera homogénea con un efecto de onda... la luz cálida perseguía a la fría y viceversa. Para romper este ritmo regular el segundo efecto, a través de una serie de destellos brillantes, consistía en una luz fría que se filtraba a través de las capas más o menos gruesas del hielo... quedando así una luz fría entre las capas. El efecto final era un ciclo luminoso dinámico que duraba 1 minuto y 30 segundos, el tiempo necesario para que el visitante contemplara la instalación y viviera la experiencia luminosa en el interior de la instalación.