Entre las colinas de los Abruzos donde se cultivan olivares y viñedos, se encuentra Tenuta di Sipio, una empresa agrícola donde se respira el encanto del ambiente rural de otros tiempos. La finca, destinada a eventos privados y restauración, ha sido sometida a la reforma de una parte de la estructura, convirtiendo así una construcción agrícola anónima en un exclusivo restaurante bioclimático.

Se confió el diseño estructural y de iluminación al arquitecto Rocco Valentini, que ha desarrollado un concepto arquitectónico inspirado en el símbolo del árbol y sus formas que se ramifican hacia arriba. Como un árbol, la estructura portante comienza desde el suelo con un tronco apoyado en una esquina de la cubierta de vidrio, desde donde comienzan todos los elementos estructurales, planchas triangulares en cor-ten que forman un complejo y armonioso entrelazado de ramas entre la sala y el techo.

Para iluminar la sala del restaurante se ha elegido el proyector Ginko 2.0 con óptica estrecha de 17° y acabado antracita; los accesorios han sido fijados directamente a las ramas cor-ten de la estructura y, con un juego de claroscuros e iluminación difusa, crean un ambiente reservado, cálido y elegante que comunica con el jardín exterior gracias a unos grandes ventanales.

En el exterior, la piscina ha sido iluminada con empotrados de subacuáticos Moby 2.1. Los aparatos que cuentan con un frontal de vidrio de 16 mm de espesor y serigrafía vitrificada, garantizan la máxima resistencia a los golpes y dan una integración visual al aparato con su revestimiento subacuático, camuflándose a la vista y dejando espacio solo a la acción luminosa.